A pesar de ser un cadáver, el Mar Muerto sigue conservando las mismas propiedades curativas y sanadoras que hace más de 2.000 años. Sus beneficios son prometedores, y cada día acuden a él cientos de personas que buscan un milagro. Los buscadores del remedio natural se mezclan con practicantes del placer como relativo fin supremo. Este espacio de agua salada, de más de 70 kilómetros fronterizo de Israel, Cisjordania y Jordania, es un lujo natural pero cada vez más un lugar para peregrinos hedonistas.
Es una más de esas paradojas que asaltan al viajero, el lugar más salado del mundo, 3 veces más salado que cualquier otro territorio marino, es la zona natural que alberga más beneficio para la salud del ser humano.

Religión, cultura, naturaleza y filosofía se unen en una simbiosis que ha dado origen a nuestra cultura judeocristiana pero que también fomenta el placer por el placer. Cuando se acude al Mar Muerto hay que despojarse de la idea de que solamente vamos a encontrar personas de la tercera edad, aquejados de dolores reumáticos, dificultades respiratorias o problemas de artrosis. Sí, están, claro que están, son parte del encanto del lugar, pero comparten baño reparador con jóvenes israelitas, interesantes jordanos, bronceados palestinos de Cisjordania, modernos libaneses o cultos sirios.

Unos buscan el milagro de la eterna juventud, los otros también. Los mayores a través del hierro, el magnesio, el cloruro de calcio, el sodio y el potasio de las aguas del Mar Muerto, y los jóvenes en horizontal, tumbados en una hamaca cercana a una piscina que recuerda al Edén.

Algo tendrá el lugar más bajo de la tierra, más de 400 metros por debajo del nivel del mar, cuando mires donde mires la historia te sale al paso. No hace falta buscar mucho. Besando el Mar Muerto se cree que pudieron ubicarse las ciudades de Sodoma y Gomorra, en la desembocadura del río Jordan dicen que es el lugar donde Jesucristo fue bautizado, y muy cerca de aquí cobran fuerza las leyendas históricas de Salomé y San Juan Baustista, así como la de Lot y su mujer, convertida, cómo no, en estatua de sal.

Flotando en sus aguas entendemos que Cleopatra, reina de Egipto, pidiera a Marco Antonio que conquistara la baja Jordania para poder relajarse y aprovechar para ella sola las propiedades naturales que la zona ofrecía. Cleopatra creía haber encontrado la fuente de la eterna juventud. Marco Antonio no sólo conquistó la zona sino que hizo que se crearan allí los primeros balnearios que, lógicamente, fueron para su uso y disfrute. Pero de ellos hablaremos más adelante cuando recorramos Hammamat Ma’in.

Pero Cleopatra sabía de sus propiedades saludables porque ya los egipcios las habían descubierto. De hecho, algunas momias fueron embalsamadas con barro de las orillas del mar Muerto, confiando en que se produjera el milagro. Ahora toman el relevo las industrias cosméticas que comercializan los productos del mar Muerto por todo el mundo avalado por su balsámica historia.
Pero las aguas del mar Muerto no son milagrosas. Eso sí, son muy buenas para enfermedades de la piel, dolencias reumáticas e incluso se ha descubierto que también es beneficiosa para curar enfermedades respiratorias. Un baño de barro aporta sales y minerales en cantidades suficientes para producir un efecto analgésico y beneficioso totalmente natural.
Sus propiedades saludables y sus beneficios siguen intactos pero las antiguas civilizaciones, las leyendas, el oropel y la fanfarria solo queda la imaginación y los textos bíblicos.

Hoy, el Mar Muerto es abrazado por numerosos hoteles de lujo y balnearios a todo confort. Aunque también se pueden hacer visitas particulares, lo normal es alojarse en uno de estos complejos residenciales en los que además de ofrecerte accesos y comodidades para unos baños saludables, ponen a disposición del cliente piscinas, saunas, balnearios, restaurantes, etc…Lo ideal para hacer una reparación en profundidad.

Entre esos complejos destaca el Mövenpick Resort & Spa Dead Sea, un pequeño poblado de casitas, muy silenciosas y cómodas. En él encuentras todo tipo de lujos: masajes, sauna, piscinas infinitas, chillouts, restaurantes, buffets de calidad…y acceso privado a la playa. Ideal para un retiro hedonista, disfrutar y estar bien, como dice el anuncio, por dentro y por fuera. Hay tiempo para relajarse en un chillout, prácticar la gula, dormitar en el filo de la piscina con un zumo natural en la mano y tumbarse a esperar nada.
Pero la voracidad del ser humano está haciendo honor a su nombre. El Mar Muerto se muere. Cada año el nivel del mar desciende un metro. Ya ha desaparecido un 30% de su superficie debido al estancamiento del río Jordán, su principal afluente. Un milagro de última hora, la construcción de un canal de 180 kilómetros entre el mar Rojo y el Mar Muerto puede impedir que se seque.
Debemos evitar su desaparición, aunque sea por no pasar a la historia como la generación que mató el mar Muerto. Contiene agua con claros beneficios para la salud, encierra todos los placeres mundanos pero sobre todo es testigo vivo de toda una cultura, la nuestra.
Algunos consejos
- Si vas al mar Muerto por la curiosidad de probar sus aguas y embadurnarte de barro, con una mañana tendrás más que suficiente. Eso sí, vete tempranito porque el calor aprieta muchísimo.
- Hay que tener especial cuidado con los ojos, no hay que mojárselos por nada del mundo. Tampoco es conveniente sumergirse si tenemos heridas o cualquier otro tipo de alteración en la piel que nos puede producir un escozor muy fuerte.
- Si vamos a disfrutar de unos días de relax, buen comer, descansar y disfrutar del verano…el mar Muerto es el mejor sitio de Oriente Medio.
- El agua está caliente, bastante caliente, podía rondar entre los 30 y los 35 grados.
















Genial, me encantaría ir al mar Muerto. No sé, se ha hablado tanto de él, tiene, como bien dices, tanta historia y tantas propiedades beneficiosas para la salud… De momento tomo nota de tus consejos, espero poder utilizarlos algún día. 🙂
Nosotros estuvimos en el 2008 y fue una sensacion muy particular el estar flotando.La verdad que lo pasamos muy bien.
Un articulo muy interesante.
Hola!
Gracias por visitar mi blog y gracias también por tus consejos! 🙂 Definitivamente los tendré en cuenta!
Un abrazo,
Ce.