“Luego han venido estos por aquí
y nos hemos bajado
a tomarnos unas cañas
Y me reído con ellos.»
Un buen día, Los Planetas
Hasta que llegué a la Universidad pensaba que Granada era poco más que un sitio para esquiar con un lugar muy bonito llamado la Alhambra que, según me contaron en el instituto, encandiló a Washington Irving. En Granada estudiaba la carrera de Farmacia Pablo Valenzuela, un colega de Olivenza mayor que nosotros con el que escuchábamos heavy (fan de los Judas Priest) y jugábamos a Rol. Gracias a él pude averiguar que por allí había bastante marcha, que estaba lejos y que hablaban muy mal. Pero vuelvo a lo de la Universidad que me pierdo. Creo que gracias al Pellis mi conocimiento de lo que se cocía en Granada fue paralelo a que se produjera. Es decir que me di cuenta al tiempo que sucedía. Adolfo, que así se llama mi ínclito amigo, venía de tierras granaínas a estudiar a Madrid. Vivíamos juntos. Era bastante grande, pelo tirando a rubio en media melena y pellisa eterna. Un póster de Los Planetas presidía su habitación. Correría el año 1991. A mí me iban otros estilos que rozaban con el noise de Los Planetas o Lagartija Nick. El caso es que me gustaban por ejemplo Jesus and Mary Chain, y ellos no estaban muy lejos de las bandas del Albayzin. Poco a poco fui comulgando, no sin críticas, a la música indie que venía de Granada. Por aquella casa pasaron TNT, Niños Mutantes, PPM, KGB y muchos más que ahora no recuerdo. Todos pusieron su granito de arena que me acabó de convencer de que en Granada además de nieve hay arte, y que lo de la Sierra Nevada, la Alhambra, el Albaycín o la plaza Joe Strummer no son casualidades. Hay ciudades a las que se canta, otras desde las que se canta. Granada es ambas cosas: una ciudad para componer y cantar canciones, un lugar para inspirarse e interpretar.
Avance «En Granada es posible» from lasdelcine on Vimeo.
Del rock clásico de Miguel Ríos, Los Ángeles o Almíbar; al noise de Lagartija Nick, KGB, Magic, Los Planetas o PPM; pasando por el pop-rock de La Guardia, 091 o Lori Meyers. Todo fusionado con la poesía o el flamenco de innovadores como Enrique Morente. Y lo mejor de todo es que todos estos grupos y creadores continúan en Granada. No hicieron el petate para irse a Madrid o Barcelona sino que continúan anclados a unas raíces a las que no pueden renunciar porque no sólo les mantiene vivos sino que les sirve de inspiración. Hemos recorrido los lugares más rockeros de Granada en busca de inspiración entre copas, cervezas, vinos, tapas y discos. Estas son las paradas de nuestro recorrido.
Sería capaz de cambiar
el calendario lunar
para verte aquí en granada
un día más.LN Granada, Supersubmarina
Para tapear.-
Amador (Pintor López Mezquita, 13)
“…y siempre voy al Amador por si apareces”. Muy pocas veces una estrofa de una canción ha sido tan rentable para un bar. Qué puedo hacer fue el primer single del primer disco Super 8 de Los Planetas allá por el año 1995 y desde entonces, el bar Amador se coló en todas las guías turístico-rockeras de la ciudad. Reabierto hace unos meses, el Amador es un bar de tapas para un público universitario. Buena relación calidad-precio, el bar es exactamente como te lo imaginas, una tasca de barrio de las que antiguamente tenían serrín en el suelo. Buen ambiente, camareros amables y música al pelo.
El bar de Eric (Escuelas, 8)
Eric tiene entidad propia. Por derecho propio forma parte de la historia del rock granaíno. Batería de KGB, Los Planetas, Lagartija Nick, Los Evangelistas y los que vengan. Hace unos años abrió un bar en Granada que se ha convertido en sitio de reunión para curiosos y amantes de la música. También para los grupos que arriban a la ciudad para dar algún concierto. Tiene comida vegana y raciones que mezclan formas modernas con ingredientes tradicionales. Tiene un rincón fetichista con algunas cosas de Joe Strummer, de Johnny Rotten de los Sex Pistols, de Ana Curra o de la Bien Querida… Cerveza en mano podemos curiosear por las decenas de fotos que cubren sus paredes o las entradas y flyers que las empapelan.
Soria (Plaza Trinidad, 3)
Es la sede de los Lori Meyers. Si vas por allí y no te encuentras a ninguno de ellos es porque están sobando o de gira. Su dueño, Fran, prepara un buen arroz como aperitivo para las cañas. Es un local pequeño y muy clásico. Si vas un fin de semana a Granada y quieres ir al Soria, tendrás que hacerlo el sábado a la hora de las cañas. Por la tarde y el domingo, cierra.
Loop Bar & Records (San Matías, 8)
Si el lema de un bar es “Nos interesa la música, fundamentalmente independiente, y en vinilo” hay que tirarse dentro de cabeza. Y en el caso del Loop Bar no te arrepentirás. Si vas buscando las mejores tapas de Granada probablemente no sea tu sitio pero sin embargo encontrarás un ambiente excelente con una comida aceptable. Tomar una cerveza y una tapa mientras curioseas discos de grupos inimaginables es lo más cerca que se puede estar del paraíso. Precaución: se te puede hacer raro mirar una portada y que alguno de ese mismo grupo esté apoyado en la barra.
MAKING OFF EGEP from lasdelcine on Vimeo.
Botánico (Málaga, 3)
En el Botánico donde acaba el bar empieza el café y dónde termina el café comienza el restaurante. Este local frente al Jardín Botánico de la Facultad de Derecho es parada obligada en algún momento del día gracias sobre todo a su horario de cocina: de doce de la mañana a las doce de la noche. Desde que abrió sus puertas ha sido el sitio elegido por escritores, poetas, cineastas y músicos de rock. De hecho, su cercanía con Planta Baja hace que sea el restaurante elegido por las bandas que van a tocar a la sala. Este moderno local tiene una carta muy variada que mezcla la cocina mediterránea con otras del resto del mundo. Hay menú del día. Los viernes por la noche hay sesiones de Djs y Chill Out.
Papaupa (Molinos, 16. Realejo)
Lugar de encuentro entre Colombia y España, el Papaupa entra por la vista, por el gusto y por el oído. Nada más llegar sorprende la decoración vintage, con elementos como sacados directamente de casa de la abuela. No falta el rincón con la televisión de tubo, los sofás de escai y los platos de Duralex. Música jazz y rock y muchos libros en las estanterías. Los Niños Mutantes son fieles a su ceviche de langostinos y a las patatas criollas con mojo.
Los conciertos en el Lemon Rock&Hostel son de vértigo. Foto: J.M. GrimaldiLemon Rock Bar & Hostel (Montalbán, 6)
Abrió hace relativamente poco y se ha convertido en un referente musical en los bares de Granada. Este hostel internacional tiene un bar que organiza conciertos casi a diario, muchos de ellos gratis, y es parada obligada para todos los que busquen música en directo y buen ambiente en Granada. Por aquí han pasado Sr. Chinarro o Napoleón Solo. Ubicado dentro de una casa señorial del siglo XVII, en su decoración conviven elementos clásicos e industriales y una iluminación muy cuidada que da una sensación muy acogedora. En su carta compiten hamburguesas con ensaladas o huevos rotos con jamón.
La Porrona (Plaza Larga, 4. Albayzín)
Lo más rockero que vas a encontrar en La Porrona es su dueña, la Porri. Con 8 años ya actuaba en los tablaos del Sacromonte. Ahora, a sus cerca de 60 años presume de haber desplegado su duende a los más poderosos del planeta. “La última la Michelle Obama. Yo me presenté gratis para bailarle y me alegro una jartá”, recuerda Porri de aquel momento. Uno más porque también ha movido desplegado su arte para el Rey Juan Carlos, Sofía y Letizia, Balduino, Ava Gadner, Omar Shariff o Pedro Duque. De hecho, todavía no es raro encontrarla por el bar cantando y bailando mientras lleva una bandeja a una mesa. Ella sólo es motivo más que suficiente para visitar La Porrona. Pero si además añadimos que fue el bar donde se fraguó el disco Omega, de Enrique Morente y Lagartija Nick, se nos disipa cualquier duda para ir allí a tomar algo y charlar con la Porri. Y qué quieres que te diga, lo de menos son las tapas.
Gitana si me quisieras
Gitana si me quisieras
te compraría en Granada la mejor cueva.
Espíritu Olímpico, Los Planetas
Para comprar discos.-
Discos Bora-bora (Plaza de la Universidad,1)
Perfecto nombre de isla paradisíaca para esta tienda de discos. El vinilo finalmente le está ganando la partida a los cds y el Bora Bora es un de los máximos exponentes de esa “guerra” de paladares sonoros. En Bora Bora los discos son algo más que música, son objetos de coleccismo y veneración. Por eso los rodean de camisetas, carteles de conciertos históricos, instrumentos clásicos y un fetichismo para sacar la cámara y fotografíar. Al más puro estilo Austin, los sábados celebran conciertos en la propia tienda lo que da una vida increible a la Plaza de la Universidad y los alrededores.
Marcapasos (Duquesa, 6)
No dudes en preguntar y llevarte una sorpresa del Marcapasos. 9 de cada 10 melómanos recomiendan salir de la tienda con un vinilo desconocido bajo el brazo. Rock, Pop, Soul, Funk, Jazz, Electrónica, Hip Hop, Dub, Experimental…Llevan más de 20 años aconsejando, comprando y vendiendo discos. Ahora también online. Si vas por Granada no dejes de entrar en ese “botiquín de estimulantes sonoros” que es el Marcapasos.
Para peregrinar.-
Casa Natal de Enrique Morente (Cuesta de San Gregorio, 6)
“Yo tenía que haber sido rockero”, dice Morente en el documental Omega, un viaje por la concepción y elaboración del disco que el cantaor flamenco hizo con Lagartija Nick para homenajear a Federico García Lorca y a Leonard Cohen. Transgresor desde un arte tan ortodoxo, Morente se ha convertido en la puerta de entrada al género flamenco desde planteamientos sonoros algo más modernos. Su casa natal se sitúa en el número 9 de la cuesta de San Gregorio, en el Albayzín. La fachada luce una placa conmemorativa: “En esta casa nació el cantaor Enrique Morente 1941-2010”. La casa ha sido reconvertida en apartamentos turísticos que se pueden alquilar por unos 60 euros la noche.
Plaza de Joe Strummer (antigua Plaza Pilar de Escoriaza)
El líder y guitarrista de los Clash vivió durante algunos años en Granada. Estaba enamorado de la ciudad y de Andalucía. De hecho, hace unos años se estrenó un documental que muestra ese amor bajo el título Quiero tener una ferretería en Andalucía. En ella creó vínculos muy estrechos con grupos locales como los Lagartija Nick o 091. Hoy se le recuerda en la ciudad con un plaza que lleva su nombre y que fue inaugurada hace unos años de la mejor manera posible: con un concierto en su honor. El sitio, antes llamado plaza del Pilar de Escoriaza, tiene unas vistas inmejorables y está custodiado por los grafittis del Niño de las Pinturas.
Vuelvo a Granada
vuelvo a mi hogar
El tren va muy despacio
hay mucho tiempo
para llegar.Vuelvo a Granada, Miguel Ríos
Para beber.-
Rainbow (Marqués don Gonzalo, s/n. Universidad)
Es el bar más heavy de Granada. Death, trash, speed, hard rock, glam o heavy tradicional, todo tiene cabida en este antro de lujo adornado con un mural en honor a los grupos más importantes del mundo metalero. Es mítico el flyer firmado por DIO y dedicado al local. No te pierdas detalles como el vikingo Manuel, encargado de recoger vasos y jarras, la guitarra que cuelga detrás de la barra o el tirador de cerveza con adornos a lo Megadeth. No hay banda de metal que toque en Granada y que no acabe en este garito. Los integrantes de Helloween o Jaded Heart ya han probado su cerveza.
Ruido Rosa (Sol, 18)
El 21 de marzo de 2017, los dueños del local Victor y José Ignacio Lapido anuncian el cierre de su mítica sala. Acosados a multas por el ayuntamiento publican este comunicado en Facebook para anunciar que el Ruido Rosa dejará de sonar. Una noticia muy triste. Cuando estuve en Granada para hacer este artículo todavía estaba abierto. Sobre él escribí las líneas que puedes leer más abajo y que no me resisto a eliminar del texto.
Este 2017 cumplen 30 años con las puertas abiertas a cualquier opción musical interesante y de calidad. Víctor y José Ignacio Lapido, los integrantes de 091 lo fundaron en 1987 y detrás de la barra estuvo trabajando el cantante de Lori Meyers, Noni. Dice la leyenda que fue en el Ruido Rosa donde entregó la maqueta del grupo al productor discográfico que luego se convirtió en su primer LP. Lo que sí es cierto es que en su interior, los Lori grabaron parte del videoclip de su primer single, Dilema. Su música abarca la psicodelia de los años setenta, música indie y bandas locales. El local está algo escondido, es bastante pequeño y se llena en seguida. Vayas cuando vayas es muy probable que te encuentres con algún músico granaíno acodado en su barra.
Flashback (Horno de Haza, 23)
Más que un bar parece un museo con tirador de cerveza. El Flashback está totalmente empapelado de posters, cuadros, entradas, carteles de conciertos, de películas…todo lo relacionado con la cultura pop y, sobre todo, con la cultura del rock and roll. La música va desde los Cramps hasta la banda sonora de los dibujos de la Abeja Maya. Aunque abrió sus puertas en 1998 en la calle Buen Suceso y llegó a ser un referente en Granada para los amantes de la música de los 60, 70 y 80, ahora tienen una nueva ubicación y una tendencia algo más ecléctica. Divertido para echar un baile mientras miras embobado su pantalla gigante sobre la que proyectan videoclips con las canciones que suenan. Muy buen ambiente de gente más bien mayorcita que busca recordar la música de los 90.
Liberia (Duquesa, 8)
Sitio histórico en Granada. Todos los sábados y domingos hay conciertos acústicos a 5€ café y copa. El resto de días también hay conciertos así que hay que estar atentos a su programación. Es un lugar venerado por los artistas por el tremendo respeto de su público. Ideal también para tomar un café tranquilamente y charlar un rato mientras suenan Pearl Jam, Soundgarden o Smashing Pumpkins. En sus más de 30 años de historia ha pasado por allí la Blues Band de Granada, los Lagartos, o el maestro del flamento, Manolo Osuna. Si nada de esto te convence, falta lo mejor: tiene billar, pinball y dardos.
Para rematar.-
Planta Baja (Horno de Abad, 11)
Es el centro neurálgico de la cultura musical de Granada desde los años 80. Hoy están bajo la dirección de los miembros de Eskorzo. Su contribución al mundo de rock granadino es tal que está compendiada en un libro Planta Baja 1983-1993, un compendio de testimonios que revela la historia de la modernidad en Granada y la crónica del underground al mismo tiempo. Hoy día sigue siendo mucho más que una sala de conciertos. Es un espacio para la provocación, para la vanguardia, un espacio de agitación y experimentación cuya fama ha acabado por transcender generaciones, la ciudad y hasta la propia sala. Si tienes que elegir un solo local de Granada donde vivir la historia del rock en la ciudad (sería una pena) el Planta Baja debe ser tu elección.
El Tren (Carretera de Málaga, 136, Nave 7)
Está en las afueras de Granada, en el barrio de La Chana, y su público son mayoritariamente veinteañeros con ansias de rock. Canciones de toda la vida con temas de nueva tendencia forman el cóctel musical de este local que también organiza conciertos. Por ella pasan artistas nacionales e internacionales. La Sala también cuenta con local de ensayo para grupos y su propio estudio de grabación.
Para dormir.-
En Granada hay muchos y variados alojamientos. Lo mejor es, por ejemplo, utilizar el buscador de Hundredrooms en Granada para conseguir el mejor alojamiento al mejor precio. Nosotros nos quedamos en el Hostal Verona, un lugar en pleno centro de Granada y a un precio más que asequible. Las habitaciones son limpias, el sitio está totalmente renovado y la gente que trabaja allí carecen de la típica malafollá granaína.
Si quieres conocer todas las opiniones de todos los pubs, en Granada a parte de seguir a hhttps://www.viajesrockyfotos.com/ , debes seguir de forma obligada a esta web http://losdelpub.es , tendrás información actualizada de los sitios de fiesta de Granada. Quizás descubras muchos sitios que no conozcas
En Granada se habla muy mal? Y qué hiciste para entender a la gente?
Pff, menudo paleto y corto de mira eres.
Vete a tu casa/pueblo/ cueva y déjanos en paz!