Si la sociedad tunecina hablara tendría voz de mujer. Ellas participan y deciden. Las mujeres de Túnez han tejido una alfombra de derechos y libertades sin igual en el mundo árabe. Aunque falta mucho para su integración plena, lo cierto es que una avanzada legislación hace posible que puedan votar, abortar, casarse con quien quieran y elegir si ponerse o no el hijab. Una teoría que contrasta con una realidad social que mantiene partes de sombra. En Túnez, la Iglesia y el Estado se separaron hace más de 60 años, aún así la cultura y las costumbres ralentizan un proceso ya imparable que pone a la mujer a jugar un papel fundamental en la sociedad tunecina. La igualdad, como el mar, está más cerca en Túnez tras el paso histórico que acaba de dar el país con la aprobación de la nueva ley contra la violencia de género. Ser mujer es algo más fácil. Éstas son algunas de las peculiaridades que hacen a Túnez un país más igualitario, un lugar que abraza la modernidad en el mundo árabe y coloca a la mujer en el lugar que se merece.
-Voto sí.- A partir de los 18 años, las tunecinas tienen el mismo derecho que los hombres a elegir a sus representantes políticos. Un derecho universal que instauró Habib Burguiba en 1957, un año después de la independencia de la ocupación francesa. A pesar de los convulsos momentos que han sacudido al país en la última década, hoy en día ellas tienen presencia activa en la sociedad política y civil y contribuyen al desarrollo del país. Cuando Túnez logró la independencia supuso una bocanada de aire fresco. El país experimentó un profundo cambio. Sobre todo para las mujeres a las que por fin se les concedió un derecho tan universal como poder elegir a sus representantes políticos. Igual que los hombres, las mujeres también pueden votar a partir de los 18 años. Hasta la fecha, algo impensable. El responsable de este cambio fue Habib Burguiba, el primer presidente de la República de Túnez, promotor e impulsor de los derechos y libertades que empezarían a tener las tunecinas. A pesar de los convulsos momentos que han sacudido al país en la última década, hoy en día ellas tienen presencia activa en la sociedad política y civil y contribuyen al desarrollo del país.
[box][box]Ellos son un ejemplo de convivencia, paz, respeto y entendimiento entre países musulmanes. Son cuatro universitarios de Medicina. De izquierda a derecha: jordano, tunecina, argelino y tunecino. Juntos disfrutan de un cálido fin de semana en el turístico pueblo costero Sidi Bou Said.[/box]
-Niños y niñas juntos, pero no revueltos. – En Túnez, las mujeres tienen el mismo derecho a estudiar que los hombres. De hecho, son mayoría en las aulas universitarias. Con la llegada de Burguiba al poder, se impuso un estado laico, donde la educación comenzó a ser pública y gratuita para niños y niñas de todas las clases sociales. Menores de entre 6 a 16 años de edad para los que además la escolarización es obligatoria. En realidad, esto es un avance importantísimo ya que ha supuesto la construcción de más escuelas en zonas rurales y que los menores se familiaricen (0 eso es al menos lo que se pretende) con ideas básicas de comportamiento cívico. Antes de la independencia, la educación era cosa de hombres y de élites. Sólo las mujeres con padres poderosos tenían hueco en las aulas. El resto, es decir, la mayoría de las niñas, no iban a la escuela. Sus padres se encargaban de hacer también de maestros y en casa les enseñaban los conocimientos básicos. Las universidades se han convertido en la verdadera llave del cambio y desarrollo de Túnez. Las principales ciudades universitarias son Túnez capital, Susa, Monastir y Sfax.
Las nuevas generaciones tienen el reto de consolidar la igualdad en Túnez-La mujer no se queda en casa. – Cada vez es más habitual encontrarse a tunecinas ejecutivas por las calles de la capital. Quizás con un poco más de recato de lo que estamos acostumbrados en los países occidentales pero ejecutiva al fin y al cabo. 1956 abrió la puerta a las emprendedoras, a la libertad de montar un negocio y salir más allá de las cuatro paredes de casa o el campo, como mucho. La actual mujer tunecina está formada, preparada para brillar en política, economía, cultura o el mundo empresarial, igual que lo puede estar un hombre. A la hora de jubilarse, ellos lo hacen a los 60 años. Ellas lo hacen a los 55 sólo cobrando el 80% del sueldo para incentivar la contratación de jóvenes. Desde 1959 las mujeres pueden ser candidatas para el gobierno. Y en 1983, Fhetia Mzali fue la primera en ocupar un cargo político: el Ministerio de Familia y Mujeres. El actual gobierno es el que más mujeres tiene en su Ejecutivo de toda la democracia.
Las mujeres trabajan, tienen negocios y participan en el desarrollo del país-Los bares siguen siendo de ellos. – Aunque Túnez camina hacia la igualdad, hay determinados aspectos de la vida social que siguen estando reservados para ellos. Las terrazas de los bares, sobre todo en zonas rurales, están atiborradas de hombres. Ni rastro de mujeres. Son los “cafés de hombres”. En los últimos años se han ido abriendo “cafés mixtos”, principalmente en las zonas turísticas y grandes ciudades donde sí comparten mesas chicas y chicos. Pero es raro encontrarlo en los pequeños pueblos. Lo normal si te pierdes por una de las numerosas localidades del país es que en las terrazas sólo haya hombres. Las mujeres quedan en casa de amigas para pasar la tarde juntas. Si viajas a Túnez puedes estar tranquila que no te pasará nada si entras en uno de estos locales. Pero ten en cuenta que no es lo normal y lo más probable es que decenas de miradas no te quiten ojo.
-Velo ¿creencia o moda?.- Bien por creencia religiosa o, simplemente, por moda, llevar velo en Túnez no es una obligación, es una opción que tiene la mujer. Es fácil averiguar a cuál de las dos opciones responde. Si la chica lleva ropa cómoda, ancha, sin marcar la silueta se trata de cultura, de creencia religiosa. Y si el velo lo combinan con ropa estrecha, marcando su figura, se trata más bien de estilo, de moda. “Una moda que ha extendido por todo el país la cadena de televisión árabe Al Yazira. Ya que en los últimos años algunas de sus presentadoras estrellas llevan el velo”, me aclaró Salah. El hijab (velo) ha generado mucha controversia en las últimas tres décadas. El presidente Burguiba, con tal de acabar con él, llegó incluso a prohibirlo en las escuelas con la esperanza de que cayera en el olvido. Pero en 2007 la tortilla se dio la vuelta. Una profesora denunció su despido por llevar el velo puesto. La justicia le dio la razón, dejando obsoletas las leyes que prohibían a las funcionarias utilizarlo. Ahora, las mujeres pueden decidir salir a la calle con él o no. En las mezquitas es obligatorio.
Ver a las mujeres conduciendo es algo habitual en Túnez-Aborto sí. – A pesar de ser un polémico tema en medio mundo, Túnez reúne unas condiciones únicas si lo comparamos con el resto de países musulmanes. En 1973 se legalizó el aborto hasta los 3 meses de estación, por cualquier motivo y a petición exclusiva de la mujer. Se practica en la sanidad pública y es gratis. Su legalización también ha permitido controlar la natalidad en un país en el que viven 11 millones de personas. De hecho, ahora registra la tasa de nacimiento más baja de todos los países árabes. Se permite una media de dos hijos por pareja.
-Eso de dos o más esposas, nanai de la china.- Los hombres legalmente sólo pueden tener una esposa. La poligamia está prohibida.Es el único país del mundo árabe que así lo recoge por ley. Las mujeres tienen derecho a divorciarse. Algo que podría parecernos de lo más normal, en la mayoría de los países árabes no lo es. Y algo muy importante, que no se van con una mano por delante y otra detrás, la ley las protege con un subsidio para la vivienda. Tampoco se puede obviar que, aunque se haya avanzado, el hombre sigue siendo “el cabeza de familia” dentro del matrimonio, el que vela por el sustento de la mujer y los hijos. “Ahora las mujeres se casan más tarde”, me comentaba Salah cuando nos cruzamos con un grupo de chicas por las calles de Tozeur celebrando la despedida de soltera de una de ellas. Van de casa en casa, no es que salgan de marcha. Antes no había edad mínima para contraer matrimonio. Ahora, sí. Está prohibido que una menor de 17 años se case. Normalmente lo hacen entre los 22 y 24 años, cuando muchas de ellas han finalizado sus estudios. Si se les declara un chico, ellas pueden darle puerta, algo que antes no podían. Y ya no son las madres de los futuros matrimonios las que se encargan de emparejarlos.
Llevar velo o no en Túnez es voluntario. Algunas se ponen el hijab por moda y otras por convicción religiosa.-Lucha contra la violencia de género (actualizado el 28 de julio de 2017). – Después de tres años de trabajo, Túnez acaba de aprobar una ambiciosa y pionera ley contra la violencia de género. Es uno de los mayores avances en los derechos de la mujer en el mundo árabe . Castigará con penas de 20 años de cárcel (incluso cadena perpetua) a quiénes mantengan relaciones sexuales con menores de 16 años. Si la joven tiene entre 16 y 18 años, el detenido se enfrentará a cinco años de cárcel. Hasta ahora podía evitarlo si se casaba con la víctima. Ahora, se acabó ese «comodín» y se hace justicia. El texto, que entrará en vigor dentro de seis meses, también recoge multas económicas por acoso sexual, incluido el verbal que se produce muy frecuentemente. Además, la norma resuelve uno de los puntos más conflictivos que era fijar la edad de madurez sexual de la mujer. Se amplia de los 13 años, según la legislación vigente, a los 18 años con la nueva ley.
-La prostitución, un trabajo más y legal. – Ejercer la prostitución está legalizado en Túnez. Pero ojo, sólo está permitida en cuatro distritos rojos repartidos en cada una de las cuatro grandes ciudades del país: Túnez capital, Susa, Sfax y Monastir. Al ser legal, las mujeres pueden denunciar si sufren malos tratos. Tienen un carnet profesional que las identifica y pagan sus impuestos. Sin embargo, este oficio, como en la mayor parte del mundo, está mal visto, sobre todo, en los pequeños municipios del país.
-Todos velan pero ellos lo entierran. – Desde lo alto de la torre del Ribat en Monastir me llamó la atención el pelotón de hombres que se formó en la plaza del Mausoleo de Burguiba durante un entierro. Ni rastro de mujeres. Al funeral sólo acuden los hombres. Ellas velan el cuerpo en casa y al día siguiente del entierro, por la mañana, van al cementerio y decoran la tumba. Durante la semana posterior al funeral, rocían con agua de azahar el nicho del ser querido que acaba de morir.
-Mujeres viajeras. – No es lo habitual cruzarte con mujeres viajeras por Túnez, pero las vi. En una de nuestras paradas, Chebika, coincidimos con dos chicas alemanas de vacaciones. Habían alquilado un coche y estaban recorriendo los principales rincones turísticos tunecinos. “Hay que tener precaución, como en cualquier país, pero nos sentimos seguras”, me dijeron cuando nos encontramos en el oasis. No hay que preocuparse por nuestra seguridad. Con aplicar el sentido común es suficiente y evitar situaciones comprometedoras, como caminar sola de noche por lugares poco transitados. Hoy en día la igualdad no es una verdad absoluta en Túnez pero el camino está allanado para consolidarse como el país más democrático de África.
El viaje a Túnez fue posible gracias a la colaboración de Turismo de Túnez.
Genial, las mujeres somos el genero fuerte 🙂 eso no hay que ponerlo en duda, jajaja y en Tunez ya se está encaminando algo grande, ojala sigan así y defiendan mucho más nuestros derechos que por años han sido pisoteados en medio oriente (y en el resto del planeta) saluditos 😉 buen blooog besos!
Muchas gracias. Aunque esté en el camino, Túnez debe seguir avanzando. Un saludo.
Me pareció un país extraordinario con mucha libertad donde me sentí muy segura y que estoy pensando seriamente poder vivir ahi,
Hola Collins! Muchas gracias por tu comentario. Si estás decidida, hazlo. En Túnez me sentí segura, integrada y bien. Cierto es que aún queda camino para alcanzar la igualdad plena entre hombres y mujeres. Están en ello. Poco a poco van dando pasos.
Un saludo y buen verano 😉