En abril emprendí un viaje por la provincia de Valladolid. Fueron varios días por pueblos, viñedos, campos, iglesias, bodegas y ruinas acompañado por algunos de los miembros de Travel Inspirers. De la experiencia y la gente que conocimos durante este tiempo salieron un puñado de fotografías. He seleccionado las que, a mi juicio, representan mejor la esencia de la provincia vallisoletana, la que cada día se afanan en moldear sus buenas gentes.
Uno de mis maestros, José Manuel Navia, de quién he tomado prestado el título para este artículo, dice que al menos hay que hacer una buena foto al día. O intentarlo añado yo. Aquí podrás ver fotografías de ese viaje, si son buenas o no, es decir si transmiten será cuestión tuya. Yo seleccioné y disparé, espero que tú viéndolas te traslades a dónde fueron hechas.


















Enhorabuena por tu viaje y fotos, me quedo con 3, la del Monasterio de la Santa Espina, la Capilla de los Benavente y El lechazo, sigue disfrutando con tus fotos!! Saludos.
Valladolid, además de seca y rancia, tiene todos los males: gente huraña y maleducada, seca y antipática. Junto con Murcia, son dos sitios a los que no volveré.
Si algún día vuelves por aquí no dejes de avisar! Aprovecho y te dejo mi guía de imprescindibles: http://www.carpe-diem.today/blog/2014/7/10/valladolid-gastronoma-y-buen-vino-imn-para-sibaritas